MUÑECA SELENE DE FAMOSA.

A pesar de que muchas personas la conocen por Nancy Selene, ésta no es una Nancy sino más bien la amiga de Nancy; justamente la que vino de las estrellas. Ese era su eslogan en el año 1981 cuando Famosa nos la dio a conocer. 

Recuerdo que de pequeña siempre quise tener una, y que a pesar de que mis padres solían complacerme con las muñecas que yo pedía, imagino que les fue imposible conseguirla para alguna de mis celebraciones donde siempre me regalaban aquellos juguetes que me gustaban. Así que Selene era una de las muñecas pendiente en mi lista de adulta. Sin embargo al ver lo desorbitado de los precios que se manejaban en las webs de segunda mano, madre mía, me parecía imposible encontrar una. Por menos de 100€ no encontraba ninguna que no estuviera con la melena cortada, teñida, le hubiesen cambiado los ojos o solo fuera una parte de la muñeca. 

Y para ser honestos, ni aunque hubiese podido pagarlo pagaría tanto dinero por una muñeca. Mi forma de ser no me lo permite, aunque no me meto con quien pueda hacerlo y disfrute con ello. Cada cual tiene su propio nivel de satisfacción y recursos para alcanzarlo. Pero a mi me parecen demasiado altos los precios que vi por incluir un envase original deteriorado. Eso sin contar con que la chaqueta original con el tiempo se deshacía el material metalizado. O correr el riesgo de que las pilas internas estuviesen estalladas que son de las cositas que se encuentran quienes suelen comprarlas. 

La peculiaridad de Selene, además de su pelo gris celeste a mechas, eran sus ojos verdes y luminosos. Con este anuncio nos la presentó Famosa en televisión en España en 1981. Haciendo las delicias de las niñas. Todas quisimos tener a Selene la amiga de Nancy. Porque además a ella, que media un centímetro más de estatura, le quedaban bien todos los complementos y conjuntos de su amiga terrestre. 

No es de extrañar que a Selene le quedaran los conjuntos de Nancy bien. Yo apoyo la teoría de algunos coleccionistas que piensan que Selene es una adaptación de la muñeca Greta. Más cuando de todos es sabido que Famosa aprovechaba tiradas de muñecas para crear otros modelos o mezclar piezas. 

Greta de Famosa se comercializó entre 1980 y 1984. De 45 cm de estatura, Greta media tres centímetros más que Nancy y dos más que Selene. Si miramos la imágenes de abajo, se ve el gran parecido con Selene . Y si además resulta que ambas coincidieron en ventas en un mismo periodo de tiempo (Selene salió en el catálogo de 1981) personalmente me decanto más por esta teoría que por otra que circula sobre la Nancy Daypa. 

De la amiga de Nancy que vino de las estrellas, hubo dos versiones. La vestida en color plata y otra versión en dorado y rojo que es más difícil de obtener para los coleccionistas. Es ésta que te muestro más abajo de un anuncio de la época y también la que está en la fotografía del apartado de Nancyclopedia volumen dos, donde se habla de Selene. 

El complemento de Selene es el medallón mágico que lleva anudado al cuello. Con él se activan las luces de sus ojitos. Es un medallón de plástico dorado en relieve con la S que lleva dentro un imán. Al poner la parte del imán en contacto con el pecho, los ojitos de Selene parpadean en un intenso verde. Esto funciona por un sistema interno a pilas que hace que se enciendan por contacto las bombillas que van dentro de la cabeza en la cavidad de los ojos. 

Estas muñecas con su espectacular melena tenían como debilidad que a diferencia de Nancy, no se les podía lavar el pelo. Al menos no como las niñas de mi epoca hacian, no se podían bañar. Fueron muchas las que se quedaron pronto sin su superpoder de rayos de visión, a causa de la humedad que le entraba por los ojos y se cargaba el sistema eléctrico. Esa es la causa de que la mayoría de las Selenes jugadas no funcionan cuando se compran. Necesitan un electricista manitas que les ponga nuevo el sistema interior. 

Después de mucho buscar encontré un anuncio de una Selene por 60 €. Desnuda, sin tapa, pero con el pelo impecable. Hablé con la persona que la vendía. Y me explicó las condiciones en que estaba. Me dijo que no sabía cómo funcionaba y que no me podía garantizar que se le encendieran los ojos. Conseguí que me la dejara por 50 € y corrí el riesgo de que no funcionase. Pero tenía un palpito. El chico me dijo que antes si funcionaba pero que no entendía de electrónica y no se atrevía a tocar el mecanismo. La compré.

Continuará...