Gachupin de Vicma.
Este fue un modelo de muñeco que me ha costado encontrar. De hecho deseo saber más sobre él. Pero no me es fácil encontrar datos al respecto, más allá de subastas y ventas de segunda mano, donde los precios varían entre unos veinte y sesenta €.
He visto algunos que se venden, la mayoría en estados no muy buenos, incluidos los que aún conservan su envase original. Ese envase de plástico transparente que dejaba ver toda la muñeca con la información en un etiqueta de cartón que hacía de asa. Lo tenían muchas muñecas en los años 60/70 de los que datan la comercialización de este modelo. Recuerdo haber visto en los quioscos donde vendían juguetes de este tipo de envases sujetos con pinzas en cuerdas como si fuera ropa tendida.
He descubierto que el mismo muñeco que se denomina GAPUCHIN. lo hubo en dos tamaños. Ya que hay quienes lo anuncian de unos 40cm. y el mio apenas mide treinta. También que hay un modelo que se anuncia de niña. Y que los hay con cuerpo completo de plastico y extremidades de goma. Y una versión sonajero con el cuerpo de tela, relleno de tiras de gamuza de trapo y un cascabel dentro de la cabeza.
A ese modelo corresponde mi Pedro. El único muñeco que conservo de mi infancia por lo que significa para mi. Ya que fue el primer muñeco que tuve. Y me contaban mis padres que era mi favorito de bebé y siguió siéndolo según crecí. Hasta el punto que siempre lo guardaba, para que no me lo tocaran, cuando venía a jugar a casa mis primas o mis amigas.
Este de la imagen de abajo es el más parecido que he encontrado al mío, aunque difiere el modelo del estampado de la tela del cuerpo. Y aunque lleva tiempo en subasta, lo siguen subastando cada vez un poco más alto aunque el precio resulta barato para otros que se ven. Es un dato que me ha llamado mucho la atención.
Mi Gachupin de Vicmac es un modelo sonajero. Que se ha llevado toda mi vida adulta sobreviviendo a mudanzas. Estar escondido entre mis pertenencias y resistido la tirada de muñecos que sufrí después de casarme y descubrir que a mi marido le sobrepasaba tener muñecos almacenados en casa. Tiró los míos junto a los de mi hija cuando ésta dejaba de jugar con ellos. Todos menos a Pedro, que así se llama este bebé-abuelito con tanta mugre y al que le falta un pie.
Si alguien que pase por aquí pudiera dar alguna información más de este modelo de Vicma. Estaría muy interesada de leerle. Porque es un muñeco muy especial para mi, ya que forma parte de la historia de mi vida y de mi más reciente hobby por la restauración.