MUÑECA LESLY DE FAMOSA COMUNIANTA DEL 76/77: CAYETANA.
Cayetana fue la cuarta Lesly en llegar a mí colección. Justo ahora cuento con siete. Pero ella llegó la cuarta después de Eva, Jane y Matilde. Luego llagarían Carla, Tiana y África. Digamos pues que Cayetana, es la Lesly de enmedio.
Cayetana, pertenece al grupo de Lesly de primera generación, las del 1976/77. Ésta pertenecía a una serie de muñecas que Famosa hizo vestidas de comunión y a las cuales dejó con melenita rubia larga y sin flequillo. Hay quienes dicen que porque parecían más buenas, con ese look.
Como la mayoría de las de su generación, tiene los brazos pequeñísimos y duros. Bailones, vamos que no se quedan quietos. La señora que la vendía pedía 45€ por ella y vi una ganga en esa compra. Pero lo más bueno, es que la señora hablando conmigo de May de Famosa, me dijo que por 10€ más me incluía junto con Lesly un lote de dos May. Acepté sin pensarlo. Pensé que por muy mal que vinieran las May por ese precio era una buena oferta. Y compré.
La sorpresa fue para bien cuando al poner la chica las fotos, resultó que una de las May era la morena que yo no tenía en mi colección. Estaba perfecta y traía el vestido original (el outfit completo llevaba sombrero, delantal, zapatos, calcetines y braguita). Era una de principios de la media generación y aunque solo traía el vestidito, era ya una joyita.
La otra May era una pelirroja que si tenía ya en mi colección. Aunque ésta si traía su outfit completo de origen. Y para mi fortuna, era diferente al que yo tenía de comunión con la misma muñeca... la pelirrojita de melena lacia. Y aunque ésta llegó manchada de tinta, para mi no era un problema. Correspondía también a las May de media generación, posterior a la morena. Puedes leer AQUÍ cómo arreglé a esta May que se terminó por convertir en Juanita. Y en este otro ENLACE puedes ver como la caractericé para solventar un accidente que tuvimos después de haber conseguido quitar todas las manchas.
La estrella del lote venía casi perfecta de no ser por un ojo fijo y la cabeza que se ve, que la habían guardado en mala postura y la tenía torcida y hundida un poco en la frente. Fue una buena compra, aunque al principio me parecía caro. A ver que me explique... 45€ por una Lesly de primera generación no me resultaba caro barajando los precios que veía. El caso es que era caro para mi presupuesto. Pero no pude dejar pasar la oportunidad, porque eso es lo que fue. Así resultó que Cayetana se convirtió en mi cuarta Lesly.
Una vez que Cayetana estuvo en casa y le pasé la primera revisión. Observé que ciertamente los problemas eran el ojito y la cabeza torcida y bollada. El ojo que traía atascado, además perdió las pestañas en un periquete, estaban muy sueltas. Y la cuenca tenía una pequeña fisura. Se notaba que ya la habían restaurado alguna vez, o al menos intentado. Porque además de esos detalles, también tenia las pequitas de ese lado de la cara más claras.
Me decidí a arreglarlo sacándolo y poniendo unas pestañas nuevas. Las del otro ojo estaban fuertes, así que por esta vez las deje estar. Se notaba que le habían echado algún tipo de producto para fijarlas, porque la corrosión se notaba en el párpado. En verdad los dos párpados tenían señales de haber usado algún producto sobre el borde de las pestañas.
Para que las pestañas no se caían lo mejor es colocarlas hasta el fondo y fijarlas bien. Es importante ajustar ancho del corte adecuado y no cortar ninguno de los filos de unión. El de fuera si hay que cortarlo, pero eso es al final cuando está ya el ojo bien colocado. De ese modo no sufren las pestañas, ni se despeinan.
Foto superior izquierda: Al introducir la tira de pestañas, hay personas que ponen el pegamento en el filo interno. Y lo aprietan contra el interior del párpado, esto provoca dos problemas. Pestañas inestables, porque es frágil la unión de las pestañas a este protector que trae para unirlas. Y dos, que el pegamento aplicado dañe la pintura de los párpados si se sale al ejercer presión. Yo lo recomiendo es meter la pestaña hasta que se alinee con el borde del exterior de la carcasa y aplicar donde marca la flecha un pelin de silicona caliente con la pistona. Luego tal y como se ve en la imagen de la derecha, rellenar de silicona el hueco. Ambas imágenes están muy claras. Si lo haces así estas pestañas son para los restos. Ah, y si alguna vez hay que quitarlas, con una pinzas dando un pellizco a la silicona y tirando sale bien.
Hay quienes recortan el protector en este momento de la imagen de arriba porque es más fácil. Pero las pestañas sufren más. Te recomiendo que lo cortes una vez colocados en la muñeca y que te ayudes de una tijeras de punta curva de bordar. Son muy finas y pequeñas y solo debes seguir el corte junto al plástico.
El ojo que no restauré de pestañas, tiene un pequeño remolino en las varias pestañas del rabillo. Pero no soy amiga de forzar una muñeca antigua por una menudencia. Así que me limité a pintar con un pincel fino y acrílico color carne, los párpados que estaban algo deteriorados.
Lo mejor para que los bracitos duros se puedan mantener erguidos, son las gomas de silicona para el pelo. A mi me gustan porque no dejan residuos al pasar el tiempo y pones las que necesites para que coja la dureza necesaria. Solo tienes que ir probando, añadiendo de una en una hasta la consistencia deseada.
Por último tuve a Cayetana con la cabeza liada con venda y amarrada por el cuello y los hombros en una posición correcta. Y así la guardé unos meses.